El riesgo país es uno de los factores si no el más importante que una
empresa multinacional (EMN) debe analizar en el momento de la globalización o
diversificación de sus inversiones. En este sentido, un país anfitrión altamente segmentado y políticamente inestable no es para nada atractivo para
una inversión económica directa (IED).
Cuando un país entra en problemas de liquidez de divisas, se puede decir
que se encuentra en situación de alto riesgo para las inversiones tanto de las
empresas domésticas como de las transnacionales que operan en el mercado afectado.
En este sentido, las multinacionales vienen a ser las más impactadas al ser bloqueadas sus divisas.
Por ejemplo, la Asociación Internacional de Transporte Aéreo a través de
su delegado, el Sr. Alejandre de Juniac, informó que Venezuela tiene bloqueados
fondos de aerolíneas que operan en su territorio, cuyo monto bloqueado asciende
a 3,780 millones de dólares (Las Américas, 2018).
La cantidad de divisas pendientes de
repatriar esta afectando a dieciséis países, en este sentido, Venezuela se a
convertido en un riesgo país para el comercio internacional debido a que no puede
cumplir con sus compromisos a los acuerdos internacionales y con las
obligaciones a los tratados que permiten a las aerolíneas repatriar los
ingresos obtenidos por la venta de boletos y otras actividades (Las Américas,
2018).
Ante esta situación de riesgo político que afecta la economía del país,
IATA destaca que “la conectividad que brinda la aviación es vital para el
crecimiento económico y el desarrollo del país, teniendo en cuenta que la aviación
genera empleo, impulsa el comercio y mejora la vida de las personas. Pero las
aerolíneas necesitan tener garantías de poder repatriar sus ingresos y llevar
los beneficios a los mercados” sin embargo, dada la gravedad del caso
venezolano, a Juniac, delegado de IATA, le parece poco probable que se pueda
lograr una solución en el corto plazo (Las Américas, 2018).
Las EMN con frecuencia se encuentran ante problemas ajenos a su misma
estructura financiera debido a que los países anfitriones experimentan de
alguna manera conflictos que afectan sus mercados en consecuencia a sus economías.
En este sentido y como una manera de contrarrestar el riesgo concerniente
a la inestabilidad política del país anfitrión, las EMN tendrían que operan sus
servicios bajo el sistema japonés “Justo
a Tiempo” (JIT), manteniendo sus inventarios cercanos a cero, de esta manera controlarían los riesgos con la velocidad de la rotación de sus inventarios, beneficiándose incluso con flujos de efectivo crecientes teniendo menor cantidad de capital
congelado en el ciclo de producción (Eiteman, 2011, p. 477).
Referencias
Eiteman,
D., Stonehill, A. & Moffett, M. (2011). Las Finanzas en las empresas
multinacionales. Pearson Educación de México, S.A. de C.V.
Las Américas (2018). Venezuela tiene bloqueados fondos de aerolíneas
que ascienden a $ 3,780 millones de dólares. Edición del 5/6/2018
