La producción en el nuevo milenio, se enfrenta al desafío de la volatilidad de los gustos de un consumidor bien informado cada más exigente que configuran principalmente los mercados maduros. En este contexto, el componente productivo con que la industria enfrenta la inestabilidad del mercado, se define como la relación de los resultados obtenidos de los recursos tan diversos, llámese empleados, como también el aire, tierra, materias primas, trabajadores de planta, tiempo, energía, máquinas de producción y máquinas de procesamiento de la información, ejecutivos, consultores externos, etc. Conjunto que se debe atender con la mayor eficiencia y eficacia con el objetivo supremo de llegar al gusto y poder de compra de su majestad, el consumidor. En estas circunstancias, se debe destacar, que en toda ocasión el factor tiempo y la búsqueda continua de la calidad se hace presente.
Introducción
En este contexto, el sentido de la permanencia en el mercado como sinónimo de competitividad en el nuevo escenario en que desarrolla la producción, impone estrictas condiciones en la entrega de sus productos que además de satisfacer las necesidades del consumidor, lleven consigo el valor de la calidad total en algo que los clientes estén dispuestos a pagar (Maldonado, 2008).
En este contexto, el sentido de la permanencia en el mercado como sinónimo de competitividad en el nuevo escenario en que desarrolla la producción, impone estrictas condiciones en la entrega de sus productos que además de satisfacer las necesidades del consumidor, lleven consigo el valor de la calidad total en algo que los clientes estén dispuestos a pagar (Maldonado, 2008).
Análisis
de Diagnóstico
En
este marco, aunque en una gestión actualizada, la productividad como base de cantidad y precios está quedando
supeditada a los condicionantes de los periodos cortos y la rapidez en las
entregas, los términos de eficacia y eficiencia, continúan midiéndose por los
resultados obtenidos (Chase et al., (2009), no pudiéndose también, dejar de
tomarse en cuenta, los puntos de vista de las tendencias de compra y venta
desde las perspectivas siguientes:
-
La productividad de las ventas, por los resultados que se
obtienen respecto a los recursos utilizados y a la competitividad de los
factores claves siguientes:
-
Productividad en términos de cantidad y calidad.
-
Elevar las ventas en base a la calidad, desempeño y
necesidades especificas del consumidor.
-
Diseños organizacionales efectivos y oportunos (tiempo y
manejo).
-
Productividad desde el punto
de vista del cliente entregados en cantidad y calidad requerida.
-
Productividad en las
organizaciones, brindando para ello un producto o servicio de calidad al menor
precio.
-
Competitividad de las
organizaciones, en este sentido, las estructuras organizativas frente a un
mercado competitivo y globalizado, su enfoque se centra en la “manufactura
esbelta” en completa relación con los precios del mercado (Chávez, 2017).
Manufactura
Esbelta
En
este contexto, ¿a que se le denomina manufactura esbelta?, este concepto
encierra un conjunto de medidas que tienen que ver con dar respuesta efectivas
a la competitividad como subyacente de la volatilidad del mercado y la
inestabilidad de la demanda, ambos detonantes por el aumento de un consumidor
que exige productos de calidad con entregas JIT. Siendo la herramienta justo a
tiempo, la primera que Toyota trajo a los Estados Unidos, consistente en reglas
sencillas pero muy efectivas, como:
-
No se debe producir nada al
menos el cliente lo haya ordenado. El modelo heikunja soporta la rápida
adaptación de las fluctuaciones de la demanda y minimizar el desperdicio de la
espera.
-
Se nivela el trabajo, de
manera que el mismo fluya suavemente a través de la planta.
-
Se unen todos los procesos a
la demanda del cliente mediante simples herramientas visuales (kanban); es
decir, mediante señales con tarjetas con instrucciones tanto para proveedores
como para los clientes.
-
Se conjuga la flexibilidad de
la gente con la maquinaria; es decir, métodos, maquinaria y trabajadores
capaces estandarizando el trabajo, proveyendo la base para el kaizen o mejora
continua y el jidoka o automatización
con el toque humano, para que ambos minimicen y detengan los defectos.
(Maldonado, 2008).
En
este sentido, “la manufactura esbelta”, es una filosofía de producción con el
manejo de la eficiencia en todos los sectores de la organización, con
respuestas rápidas a la variación de la demanda; es decir, con un “sistema lean”
dotado de la flexibilidad necesaria para adaptarse a la volatilidad de la demanda,
reduciendo los desperdicios y los costos, elevando la competitividad de la
empresa con sus productos o servicios, ganado mayores pedidos o contratos,
obteniendo mayores beneficios económicos para los accionistas y permitiendo la
supervivencia de la organización en el mercado (Maldonado, 2008).
Principios
Básicos
El
principio básico de la estructura de la manufactura esbelta, es la distribución
orientada al producto, planteando de esta manera mayores ventajas en
comparación con las distribuciones de flujo orientadas al proceso de planear
alrededor de un grupo de equipos similares (Meyers, F. & Stephens, M., 2006).
Sistema
Simplificado
El
sistema simplificado, tiene que ver con los procesos coordinados de
programación de la producción, utilizando inventarios mínimos de materias
primas, trabajo en línea completa y cero stock de bienes terminados, en la que
las piezas llegan a la próxima estación o etapa de la producción justo a tiempo
(JIT); es decir, solo previo pedido moviéndose por todo el la línea con gran
rapidez, para de esta manera eliminar los desperdicios de la sobreproducción,
tiempo y transporte con procesos poka yoke o a prueba de fallos (Chase, 2009).
Sistema
Balanceado (Heijunka).
Dentro
de los principio básico de la producción esbelta, con el empleo del sistema
balanceado o en japonés heijunka (haga llano y nivelado), no se debe iniciar
producción alguna, hasta que no exista una demanda real del producto,
produciéndose de esta manera un balance entre la demanda y la producción
traducida en la primera llegada y la primera salida sin que exista trabajos en
proceso (Meyers, F. & Stephens, M., 2006).
Puntos
Fuertes
Las
ventajas del flujo orientado al producto de la manufactura esbelta, se
encuentra en:
-
Coordinación simplificada de
entradas y salidas que evitan hayan trabajos en proceso
-
Los usuarios y fabricantes
pueden verse y hablar entre si, con lo cual detectan y resuelven problemas con
gran rapidez
-
Hay menos inventarios en
proceso al no haber trabajos en proceso
-
Esta distribución elimina el
manejo excesivo de materiales
-
Los problemas de calidad son
mas fáciles y rápidos de detectar y corregir al haber pocas partes en el
sistema.
-
Se puede estandarizar el
proceso y la labor del operador con la mejora continua, que es el requisito
básico del modelo de la manufactura esbelta (Meyers, F. & Stephens, M.,
2006).
Puntos
Débiles
Contar
con maquinarias sofisticadas y caras, se convierte en un obstáculo al tiempo de
transformarla para productos diferentes y cambiar a una distribución orientada
al producto, teniendo en cuenta que una máquina podría servir para muchas
funciones, pero ninguna lo haría tan bien como una máquina con propósito
especial (Meyers, F. & Stephens, M., 2006).
¿Cree
usted que el propósito de un sistema simplificado de manufactura esbelta (lean
system / manufacturing) es tener un sistema balanceado?
Sin
duda alguna, sobre la interrogante planteada, es importante destacar a manera
de ilustración, la situación de un fabricante de artículos para jugar Golf,
quién mantenía regularmente un promedio de seis meses de inventario en proceso
cuando utilizaba el método de distribución orientada al proceso. Cuando cambió
su enfoque hacia el producto; es decir a un sistema lean, el nuevo método logró
que su inventario se redujera a menos de dos días (Gaona, 2009).
Es
así como el lean system, conocida también como manufactura esbelta o sistema de
producción Toyota, produce más en menos tiempo, con menos recursos, menores
espacios, menor esfuerzo humano, menos maquinaria, menores insumos; con la
condición, de proporcionarle al cliente lo que busca; con un valor incorporado
en términos de producción reducida, sin listas de espera, transporte
innecesario, sobre procedimientos o procesamiento incorrecto, sin inventarios
de productos y materia prima, sin movimientos innecesarios, sin productos
defectuosos o retrasos; justificando de esta manera, el sistema balanceado de
ingresos y salida justo a tiempo, produciendo el artículo o servicio en el
momento requerido y en la cantidad exacta (Gaona, 2009).
Conclusiones
Los
esquemas enfocados al crecimiento constante de los volúmenes de producción
fueron creación de Henry Ford (1913) condicionado a que tenía que cubrir la
demanda de todo el mundo, sistema copiado que dio muy buenos resultados para
producir armamento durante la segunda guerra mundial. En la posguerra el
sistema continuo debido a que las compañías americanas eran las únicas que
dominaban el mercado, que luego dado sus buenos resultados, el modelo fue
adoptado también empresas latinoamericanas.
En
el lejano oriente, Toyota, al no contar con un mercado grande ni la posibilidad
financiera de instalar una línea de ensamble al estilo Ford, opto por tomar
prestado algunas ideas americanas como el concepto del jale (sistema pull) que consiste
en utilizar señales de inventario mínimos para abastecer la línea (en Japón
conocido como kanban), constituyéndose luego en uno de los pilares del sistema
de producción Toyota denominado, justo a tiempo (JIT), el otro es el jidoka
(hacerlo con calidad) y para mantener la calidad en el tiempo, utilizo la idea kaizen
(mejora continua), cual es el de alcanzar la meta del lean eliminando todos los
desperdicios en una filosofía completa de luchar por la perfección y mantener
el sistema de producción Toyota.
Referencias
Chase, R., Jacobs, R.
y Aquilano, N. (2009). Administración de Operaciones: Producción y Cadena de Suministros. 12ª ed. México: McGraw
Hill
Chávez, S. (2017). Productividad como balanza entre
competitividad, ventas, cliente, calidad y
organización: Una reflexión para estudiantes. Revista: Caribeña de Ciencias
Sociales ISSN: 2254-7630
Gaona, E. (2009). Sistemas de Manufacturas. Tecnológico de
Estudios Superiores del Oriente del
Estado de México.
Maldonado, G. (2008). Herramientas y Técnicas Lean Manufacturing
en Sistemas de Producción y Calidad.
Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo.
Meyers, F. &
Stephens, M. (2006). Diseño de Instalaciones de Manufactura y
Manejo de Materiales. Pearson
Educación, 2006